Si hace poco que has entrado en contacto con el mundo del Yoga y de la Meditación, puede que no sepas qué es Yoga Nidra. Es algo todavía poco conocido en occidente.
O puede que lo conozcas porque has realizado alguna sesión de Yoga Nidra en un centro de Yoga o Terapias Naturales o como parte del programa de un retiro de Yoga y Meditación.
Casi seguramente, aun habiendo practicado en algún momento Yoga Nidra es probable que pienses en Yoga Nidra como técnica de Relajación Profunda. Sin embargo, no podemos confundir los conceptos: la relajación profunda que experimentamos en Yoga Nidra es uno de los resultados de la práctica, NO es la práctica en sí misma.
Yoga Nidra es una técnica de Meditación Mindfulness
Se define técnica de meditación mindfulness porque en todo momento la consciencia está presente, viajando a través de los cuatros estados de consciencia: físico, sutil, causal y no dual.
Es Meditación porque vamos bajando por las ondas cerebrales de un estado de actividad intensa (Beta) a estados Alfa, Theta y Delta, que propician un trabajo meditativo de nuestra mente.
Dejar la parte lógico-cognitiva por un lado y adentrarse en los diferentes estados de conciencia.
Es Mindfulness porque trabajamos con la conciencia presente en todo momento. Es lo que en España se conoce más como “Atención Plena”.
Herramienta de transformación personal
Yoga Nidra es a la vez una potente herramienta de trasformación personal, ya que permite restaurar los equilibrios que se han perdido en los cinco cuerpos que nos constituyen: físico, mental, emocional, energético y espiritual.
Yoga Nidra es una potente técnica que nos enseña a relajarnos conscientemente.
Yoga = unión Nidra = sueño
Como dice Rod Stryker, fundador de Para-Yoga, que enseña Yoga Nidra desde 1995, en su libro “The Four Desires”
“Se abre una puerta a un lugar donde podemos vernos a nosotros mismos y nuestras vidas en la luz más positiva”
Cuando explico a los alumnos de Hatha Yoga de qué se trata, noto como la mayoría se pone más tensos, nada más escuchar la palabra Meditación. Cuando los invito a probar una clase de Yoga Nidra se excusan diciendo que no “saben meditar”.
Cuando explico a los alumnos que se trata de una técnica para bajar el estrés, la ansiedad, el insomnio, y que induce una relajación profunda, que no tiene comparación con el relax final de una clase de Hatha Yoga, entonces sonríen, se relajan y la mayoría accede a probar una clase de Yoga Nidra.
Como los profesores de Yoga Nidra sabemos que esto ocurre, muchas veces se usa el subtítulo “relajación profunda o relajación consciente” como gancho. Ya que la palabra Meditación, sigue siendo un obstáculo mental para muchos.
Otra cosa que también ocurre es que muchas veces se utiliza solo parte de la técnica de Yoga Nidra tradicional. Yoga Nidra se compone de unas cuantas fases, muy precisas y con objetivos diferentes que se enlazan una tras otra, como una ruta de viaje, para ir bajando las ondas cerebrales y atravesar los diferentes cuerpos que nos componen (físico, mental, emocional, energético). Cuando la sesión de Yoga Nidra dura unos 20 minutos y gira alrededor de una visualización, lo que se ha hecho es utilizar solo parte de la ruta diseñada.
Una clase completa de Yoga Nidra según el método explicado por Swami SATYANANDA SARASWATI, debería durar entre 45 y 60 minutos, en clases de iniciación.
Este tiempo va aumentando según aumente la experiencia en la práctica de Yoga Nidra del alumno.
Cuando sales de una sesión de Yoga Nidra, habrás vivido una relajación profunda que difícilmente habrás experimentado en estado consciente con otras disciplinas.
“Yoga Nidra es la ciencia que nos permite liberar todas las tensiones, accediendo desde la consciencia a todos estados de nuestro ser.”
Recuerdo uno de los primeros talleres de Yoga Nidra Integral que he dado después de terminar mi especialización: un compañero de curso que había cursado la especialización para ampliar su propia formación como médico, pero que no iba a realizar talleres ni cursos de Nidra, me invitó a impartir el taller a un grupo de “amigos” que había reunido. Eran todos médicos y enfermeros. Seguramente conocían más del cuerpo y del cerebro humano de lo que yo iba a poder explicarles. Así que tras una breve presentación de los fundamentos de Yoga Nidra me centré en la práctica.
Al finalizar, dos anestesistas presentes en el grupo, fascinados con la técnica, se acercaron a mí y me dijeron que era lo más parecido a una “sedación consciente” que habían conocido en toda su carrera.
En Yoga Nidra te puedes relajar profundamente a niveles que quizás jamás hayas conocido antes, porque en realidad,
“Nunca te pido que pienses en relajarte”
Solo te pediré que no te duermas y que escuches mi voz. Nada más.
Porque solo cuando podemos disolver las tensiones que se acumulan en nuestro cuerpo, en nuestra mente y en nuestras emociones, aparecerá el verdadero estado de relajación.
Volviendo a la meditación, suelo decir a mis alumnos, que
“Yoga Nidra es una técnica de meditación que no necesita que tengas experiencia previa en meditar. Sin embargo, realizar Yoga Nidra con periodicidad te hará un meditador experto”
La parte final de Yoga Nidra prevé unos minutos (que varían en función de la duración de la sesión y de la experiencia de los alumnos) de meditación sentada.
Los alumnos en ese momento suelen tener la capacidad de estar perfectamente inmóviles en la postura fácil de meditación, ya que han trascendido el cuerpo. En la sala, se escucha un silencio completamente diferente al inicio. Es un silencio real, completo, que todo lo envuelve.
Es un silencio que parece susurrar al oído de todos los que están presentes:
“Quédate aquí. Aquí, estas seguro”
